Los años, el estrés, la falta de sueño o los problemas dérmicos pueden pasar factura a nuestro rostro y, en muchas personas, los primeros síntomas aparecen alrededor de los ojos.
Con el paso del tiempo, la piel de los párpados se vuelve más laxa y tiende a caer dando a nuestra cara un aspecto más triste y cansado.
Nos trae consejos la esteticista y enfermera Katherine Madriz.