La presión alta o hipertensión puede afectar el cerebro, el ojo, el corazón y también el riñón, este último órgano porque cumple un rol de filtración de la sangre, señala el doctor Paolo Duarte. Es por esta razón, que el especialista explica la importancia de mantener una regulación adecuada del flujo sanguíneo, pues se traducirá en una correcta función renal.