En el 2014 salió a la luz la denuncia de una costurera en San Carlos llamada MarÃa Otárola contra la que en ese entonces era la defensora de los Habitantes Ofelia Taitelbaum.
Otárola demandó a Taitelbaum por usar su nombre para evadir impuestos. Según la denuncia falsificaron su firma para cobrar asesorÃas, esto lo descubrió cuando solicitó un seguro a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) y se lo negaron por tener deudas pendientes con Hacienda. Descubrió que habÃan cortes por ingresos millonarios por supuestas asesorÃas que nunca brindó y que supuestamente daba a empresas ligadas con Taitelbaum.
El caso lo investigó y dio a conocer la periodista Marcela Delgado.
Pasaron alrededor de 10 años y ante una orden de captura emitida por el Tribunal Penal de Hacienda, Ofelia se entregó en el Segundo Circuito Judicial de San José, sede Goicoechea.
Ella debe descontar una pena de siete años y medio, al quedar en firme una condena por uso de documento falso. Al ser las 4:00 am, fue llevada a la cárcel Vilma Curling, en San Rafael Arriba de Desamparados, allà permaneció en una celda compartida junto a varias reclusas más a la espera de que se le asigne un espacio en algunos de los módulos que hay en el lugar.
El defensor de Taitelbaum, Hugo Navas, presentó una serie de recursos con la finalidad de sacar a su cliente de la cárcel, debido a los múltiples padecimientos, edad y necesidad de someterse a tratamientos, Ofelia podrÃa descontar la sanción carcelaria en su casa, incluso con monitoreo electrónico con tobillera.
Ella tendrá el derecho de tener visitas familiares una vez por semana y de recibir encomiendas de la misma forma que al resto de las privadas de libertad.
